La Concejalía
de Mantenimiento ha puesto en marcha estas limpiezas intensivas para adecentar
las principales calles y espacios públicos a través de baldeos de las aceras y
calzadas, recogida de residuos y un barrido intensivo. El objetivo, como ha
señalado la alcaldesa, Yolanda Cuenca, es “eliminar la suciedad y los olores
derivados de los restos de comida y bebida para que el pueblo pueda recuperar
la normalidad lo antes posible”. El dispositivo especial incluye además un
lavado completo de todos los contenedores de residuos sólidos urbanos. Un
“importante esfuerzo logístico”, como ha reconocido la concejala de
Mantenimiento, Marisol Bucero, quien, junto a la primera edil ha agradecido su
labor a los operarios municipales.
Coincidiendo
con este plan de limpieza integral, el Consistorio ha lanzado una campaña para
hacer un llamamiento a la población para que realice un buen uso de los
contenedores y respete los horarios de depósito. Del mismo modo, el
Ayuntamiento intensificará la vigilancia para el cumplimiento de la Ordenanza
Reguladora de Protección de Espacios Públicos y Convivencia Ciudadana, imponiendo
sanciones de hasta 1.000 euros a aquellos que depositen enseres voluminosos o
restos de poda en la vía pública, así como basuras orgánicas y desechables.
Así, con el fin de facilitar a los vecinos que se desprendan de sus muebles antiguos, el próximo 2 de septiembre empezará a funcionar un servicio municipal de recogida previo aviso telefónico. De forma totalmente gratuita, aquellos que se quieran deshacer de un mueble podrán solicitarlo y se les retirará de la puerta de su domicilio los lunes, entre las 11 y las 14 horas.